Son profesionales de cuello y corbata, padres y frecuentes viajeros con empleos a tiempo completo. Pero son también activistas que encabezan un creciente movimiento que se propone cambiar la política del gobierno federal sobre los escáneres de rayos X de cuerpo entero y los cateos.
Para miles de pasajeros aéreos para el Día de Acción de Gracias, el miércoles es el Día Nacional de la Negativa, una protesta organizada que comenzó en internet hace poco más de dos semanas, y que podría convertirse en una pesadilla que produzca largas demoras en los puntos de control de los aeropuertos. Sus organizadores dicen que ellos quieren concentrar la creciente cólera contra los procedimientos reforzados de seguridad impuestos por la Administración de Seguridad del Transporte Público (TSA), las cuales fueron instituidas tras el plan terrorista fallido del mes pasado para volar aviones de carga en ruta a EEUU.
La campaña de negativa es una rebelión a pequeña escala en la que los pasajeros se niegan a pasar por las aproximadamente 400 máquinas de representación óptica que se están usando en cerca de 70 aeropuertos a nivel nacional y optan por un cateo en público, el cual ha sido criticado por ser excesivamente invasivo porque las manos se deslizan por los genitales y los senos.
“Lo que yo quiero saber es si los trabajadores de TSA creen realmente que están protegiéndonos si nos toquetean cuando nos negamos a los escáneres de cuerpo entero”, dijo Cara Eshleman de Arlington, Virginia, quien saldrá el miércoles del Aeropuerto Nacional Reagan y se negará a pasar por un escáner de cuerpo completo si le indican que pase por un escáner de cuerpo entero. “Es una lástima que ya saqué mi pasaje. Si hubiera sabido esto antes, no fuera a ninguna parte en los días festivos”.
Un pasajero o varios que se rebelen y se nieguen a pasar por el escáner podría significar un largo día en el aeropuerto para muchos otros. El paso por un escáner toma normalmente entre 15 y 30 segundos, incluyendo el tiempo que toma para producir las borrosas pero reveladoras imágenes de los pasajeros y su ropa interior. Un cateo de cuerpo entero por un agente de seguridad del mismo sexo toma al menos el doble de ese tiempo, como promedio entre uno y dos minutos, según grabaciones de los cateos.
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